Ha sido, desde hace meses, la crónica de un premio anunciado.
Kobe Bryant, seguramente el mejor jugador de los que pululan por las canchas de la mejor liga del mundo, ha obtenido por fin el galardón que le faltaba y que se le había negado repetidamente. 82 de los 126 periodistas que votaban le han otorgado el primer lugar entre los elegidos (1.105 puntos). Detrás: Chris Paul (889 puntos), Kevin Garnett (670 puntos), LeBron James (438 puntos) y Dwight Howard (60 puntos).
MVP 2008
Las razones para elegirle como
MVP de la NBA no se limitan a los logros conseguidos a nivel individual y como líder de los Lakers en la presente temporada. Al menos para unos cuantos comentaristas se le está dando el premio que debía haber obtenido ya en un par de ocasiones en el pasado. Sin duda, cuando se habla de otorgar premios individuales acaban influyendo motivaciones que quizás no tengan mucho que ver con el objetivo del galardón pero, en el caso de Bryant, discutir que ha sido el MVP de la temporada 2007-2008 es demasiado atrevido.
Solamente
Chris Paul ha estado a la altura de Kobe. Igual que el escolta de los Lakers, ha sido capaz de llevar a su equipo a puestos a los que, al principio de temporada, no correspondían a la franquicia de Nueva Orleans, a pesar de su excesivo individualismo: justo lo que Bryant, con la ayuda de Jackson y la llegada de Gasol, ha sabido moderar en su justa medida.
Al final de la rueda de prensa Kobe comenta que en su lista sólo está impedir que Pau gane la medalla de oro en Pekín. Luego, entre risas, le dedica un "te quiero, tío".
Y como queda de manifiesto en la encuesta que hemos llevado a cabo: nuestros lectores también estaban de acuerdo con el jurado.