La historia de la rivalidad de Ervin "Magic" Johnson y Larry Bird comienza con la final de la NCAA de 1979. El documental Magic Johnson and Larry Bird: A Courtship of Rivals (con subtítulos en español) nos cuenta sus historias:
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12 noviembre 2017
Magic Johnson and Larry Bird: A Courtship of Rivals (vídeo)
A finales de la década de los setenta, la NBA era un proyecto empresarial en caída libre, a pesar de haberse deshecho en 1976 de su única competencia al fusionarse con la NBA. Todo cambió cuando en 1979 llegaron los dos jugadores que pondrían los cimientos de lo que es hoy la NBA. El tercer mosquetero fue el comisionado David Stern.
La historia de la rivalidad de Ervin "Magic" Johnson y Larry Bird comienza con la final de la NCAA de 1979. El documental Magic Johnson and Larry Bird: A Courtship of Rivals (con subtítulos en español) nos cuenta sus historias:
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La historia de la rivalidad de Ervin "Magic" Johnson y Larry Bird comienza con la final de la NCAA de 1979. El documental Magic Johnson and Larry Bird: A Courtship of Rivals (con subtítulos en español) nos cuenta sus historias:
14 febrero 2012
Magic/Bird, el musical
ilovenytheater.com |
Magic y Bird, Bird y Magic serán los protagonistas del musical cuyo argumento comenzará con el celebérrimo enfrentamiento en la Final Four del año 1979 entre Michigan State e Indiana State. Al parecer los propios Larry Bird y Magic Johnson han estado involucrados en la producción (al igual que la NBA).
Si el espectáculo no vale para mucho al menos los aficionados al basket se podrán entretener viendo imágenes reales que se proyectarán durante la función.
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16 junio 2008
Libros de baloncesto: Larry Bird: Drive, the story of my life
En Larry Bird: Drive, the story of my life Bob Ryan nos presenta, de la mano del propio Larry Bird, una vida pegada a un balón de baloncesto.
Se trata de un relato ameno con gran cantidad de anécdotas, como cuando Danny Ainge intentó en el último partido de la temporada "robarle" el título de mejor lanzador de tiros libres; como cuando Bird dejó plantado a Bobby Knight; o como cuando Isiah Thomas dijo que si Larry Bird fuese negro solamente sería un buen jugador más.
El relato empieza con la infancia de la futura estrella en un pequeño pueblo del estado de Indiana y acaba en el año 1990, antes de su participación con el Dream Team en los Juegos Olímpicos de Barcelona y de su retirada.
Un paseo por las experiencias baloncestísticas de una de las más grandes estrellas de la NBA: colegio, instituto, universidad y NBA.
Comprar en Amazon: Drive |
06 junio 2008
Solamente puede quedar uno: Magic and Bird
There Can Only Be One: Magic and Bird es el último vídeo que se ha sacado de la manga la NBA para promocionar, aún más, la súper final.
Continúan con la misma idea que ha caracterizado los demás vídeos.
Lo que darían algunos por haber visto a ambos, de cuerpo entero, en sus uniformes de faena ;)
Continúan con la misma idea que ha caracterizado los demás vídeos.
Lo que darían algunos por haber visto a ambos, de cuerpo entero, en sus uniformes de faena ;)
08 mayo 2008
¿"Frivolité" de Lebron James?
En uno de los descansos del segundo partido de segunda ronda Celtics-Cavaliers muestran una breve respuesta de Lebron James a la pregunta de ¿quién ha sido tu Celtic favorito? Lebron contesta que Larry Bird.
Larry Bird se retiró antes de que James cumpliese los ocho años de edad... Buena memoria...
¿Qué tal Reggie Lewis?
Larry Bird se retiró antes de que James cumpliese los ocho años de edad... Buena memoria...
¿Qué tal Reggie Lewis?
26 diciembre 2007
Larry
Especial Larry Bird en NBA TV con motivo del 50 cumpleaños del paleto de French Link. Uno sigue pensando que es el mejor jugador que ha visto nunca teniendo en cuenta todas sus limitaciones físicas.
Por cierto, he clavado el trivial: http://www.nba.com/news/birdat50_trivia1.jsp
08 agosto 2007
"Si Bird fuese negro, sería solamente otro buen jugador"
En la final de la conferencia este de la NBA de la temporada 1986-87, los Pistons de Detroit habían sido derrotados, después de una disputada serie que llegó al séptimo partido, por los Boston Celtics, que eran los vigentes campeones de la NBA. Fue la serie en la que, en el quinto partido, se produjo el famoso robo de Bird y la consiguiente canasta de Dennis Johnson.
Después del partido, el entonces rookie de los Pistons Dennis Rodman no tuvo mejor ocurrencia que decir que Larry Bird estaba sobrevalorado, porque era blanco. Cuando los periodistas fueron con el cuento a Isiah Thomas, ya entonces una megaestrella, se rió ante la pregunta y seguidamente soltó: "Si fuese negro solamente sería otro buen jugador". Un grave error propio de un novato pero no de un jugador asentado en la liga.
Los Celtics se habían clasificado para la final de la NBA contra los Lakers, pero todo el país, incluso fuera del ámbito del baloncesto, no hablaba nada más que de las palabras de Thomas.
Durante una reunión de los Celtics en un hotel de Los Ángeles, donde se encontraban preparando la final, sonó el teléfono y K.C. Jones pasó el teléfono a Bird. Era Isiah Thomas llamando para disculparse. Al parecer Larry Bird no le había dado demasiada importancia al tema hasta entonces. Fue al oír la voz del base de Detroit cuando se dio cuenta que algo estaba sucediendo. Durante la conversación trató de intentar tranquilizar a Thomas y convencerle de que no había pasado nada. Después, sí le pidió algo: que llamase a mamá Bird, una gran seguidora de Indiana University y de Thomas cuando jugaba para los hoosiers.
La NBA, como siempre preocupada por su imagen y por todo lo que tiene que ver con ella, llevó a Thomas a Los Angeles para una conferencia de prensa a la que entró acompañado de Larry Bird. Al parecer, los periodistas no se calmaron, después de haber centrado sus preguntas y correspondientes palos en Thomas, hasta que Bird decidió levantarse e irse proclamando que ya había oído todo lo que necesitaba oír, que el tema ya estaba aclarado con Isiah y que lo que tocaba en aquel momento era concentrarse y prepararse para la final ante los Lakers.
La realidad es que, desde que pronunció esas palabras, la reputación de Thomas se resintió durante toda su carrera en la NBA. Los mal pensados pudieron pensar luego que Bird mintió cuando le quitaba hierro al asunto y que, en realidad, se la estuvo guardando a Thomas durante mucho tiempo hasta que, como directivo de los Pacers, le echó del banquillo del equipo de Indiana.
Después del partido, el entonces rookie de los Pistons Dennis Rodman no tuvo mejor ocurrencia que decir que Larry Bird estaba sobrevalorado, porque era blanco. Cuando los periodistas fueron con el cuento a Isiah Thomas, ya entonces una megaestrella, se rió ante la pregunta y seguidamente soltó: "Si fuese negro solamente sería otro buen jugador". Un grave error propio de un novato pero no de un jugador asentado en la liga.
Los Celtics se habían clasificado para la final de la NBA contra los Lakers, pero todo el país, incluso fuera del ámbito del baloncesto, no hablaba nada más que de las palabras de Thomas.
Durante una reunión de los Celtics en un hotel de Los Ángeles, donde se encontraban preparando la final, sonó el teléfono y K.C. Jones pasó el teléfono a Bird. Era Isiah Thomas llamando para disculparse. Al parecer Larry Bird no le había dado demasiada importancia al tema hasta entonces. Fue al oír la voz del base de Detroit cuando se dio cuenta que algo estaba sucediendo. Durante la conversación trató de intentar tranquilizar a Thomas y convencerle de que no había pasado nada. Después, sí le pidió algo: que llamase a mamá Bird, una gran seguidora de Indiana University y de Thomas cuando jugaba para los hoosiers.
La NBA, como siempre preocupada por su imagen y por todo lo que tiene que ver con ella, llevó a Thomas a Los Angeles para una conferencia de prensa a la que entró acompañado de Larry Bird. Al parecer, los periodistas no se calmaron, después de haber centrado sus preguntas y correspondientes palos en Thomas, hasta que Bird decidió levantarse e irse proclamando que ya había oído todo lo que necesitaba oír, que el tema ya estaba aclarado con Isiah y que lo que tocaba en aquel momento era concentrarse y prepararse para la final ante los Lakers.
La realidad es que, desde que pronunció esas palabras, la reputación de Thomas se resintió durante toda su carrera en la NBA. Los mal pensados pudieron pensar luego que Bird mintió cuando le quitaba hierro al asunto y que, en realidad, se la estuvo guardando a Thomas durante mucho tiempo hasta que, como directivo de los Pacers, le echó del banquillo del equipo de Indiana.
02 julio 2007
El paleto de French Lick
Al inicio de la primera temporada de Larry Bird en Indiana State University, no acudían al pabellón de la universidad más que cuatro mil personas. Era una asistencia ridícula comparada con los llenos que se producían cada vez que jugaba el mejor equipo de Indiana: los “hoosiers” de Indiana University, con Bobby Knight al mando. Hay una pequeña historia que explica por qué el mejor jugador que ha dado el estado de Indiana eligió jugar para la hermana pobre, con la que acabaría jugando la final de la NCAA de 1979 frente a la vencedora Michigan State de “Magic” Johnson. La rivalidad de los dos jugadores que acabarían convirtiendo a la NBA en lo que es hoy en día, acababa de empezar, pero eso es otra historia.
De todas las ofertas que Bird tuvo para iniciar sus estudios universitarios, se inclinó por la que parecía la elección obvia para alguien de Indiana: la Indiana University del gran Bobby Knight. El entrenador jefe de I.U. había visto jugar a Larry en high school tres o cuatro veces y lo acabó firmando en la primavera 1974, cuando Bird cumplía su año senior en high school. Por aquel entonces el futuro alero de los Celtics no había alcanzado todavía la plenitud de su desarrollo físico. “Entonces no podía imaginar en qué se acabaría convirtiendo Bird, pero estaba seguro de que sería un muy buen jugador para nosotros”, explica Knight.
Cuando Larry se mudó a la capital del estado, prácticamente no había salido de su pequeño pueblo, French Lick, uno de los más pobres de un condado de entre los más míseros del estado de Indiana. Cuando se unió a su universidad todo era grande para aquel chico de pueblo, las distancias, las clases, el número de estudiantes. Además, estaba la cuestión económica, con apenas unos dólares en el bolsillo, tenía que llevar la ropa prestada de su compañero de habitación, Jim Wisman, que también le dejaba dinero cuando lo necesitaba. Bobby Knight recuerda que haber puesto a esos dos jugadores como compañeros de habitación fue un error por su cuenta. Eran caracteres demasiado diferentes.
El choque de pasar de vivir en un pueblo ,de apenas dos mil habitantes, a hacerlo en un campus universitario de más de treinta mil estudiantes fue tan grande y las sensaciones tan malas, que Bird decidió dejar el equipo y la universidad sin comentárselo ni a su entrenador ni a su propia familia. Larry no llegó a durar ni un mes y su equipo no había empezado a jugar. Simplemente empaquetó sus pocas pertenencias, fue caminando hacia la autopista e hizo autostop hasta que consiguió llegar a su pequeño pueblo.
Knight simplemente le dejó marchar. “Tenía muy buenos jugadores que estaban felices por estar donde estaban y estaba construyendo un gran equipo. No llegué a saber qué tipo de jugador acabaría siendo Bird hasta su año como junior en Indiana State”.
Bird explica el porqué de su marcha: “La gente pensó que hubo algún problema entre Knight y yo, pero no es cierto. La universidad era demasiado grande y yo añoraba mi casa”. Larry volvió a French Lick, donde trabajó para el ayuntamiento local cortando el césped, pintando bancos o conduciendo el camión de la basura.
Después de un año, inició sus estudios en Indiana State, donde tuvo que pasar un año sin jugar por haber cambiado de universidad. Los Sycamores, en las tres temporadas de Larry Bird en el equipo, lograrían un récord de victorias de 81-13 (50-1 jugando como locales). En su temporada como senior las estadísticas se fueron hasta los 33-1.
Fue cuando todavía le faltaba un año para acabar sus estudios cuando Red Auerbach le eligió con el número seis del draft de 1978. Al finalizar su etapa universitaria y conseguir el un contrato récord, por aquel entonces, como novato mejor pagado de la historia de la liga (firmó un contrato por tres millones de dólares) dijo aquello de que: “No importa lo bueno que soy, sigo siendo sólo un paleto de French Lick”.
Artículo publicado en Basket Confidencial, Solobasket y Zona Mixta
15 marzo 2007
Películas sobre baloncesto: Ganar de cualquier manera
En 1994, con el título original en inglés de Blue Chips, se estrenó Ganar a cualquier manera, una cinta que no tuvo demasiado éxito comercial ni de crítica pero en la que se juntaron unos cuantos nombres conocidos en el ambiente baloncestístico.
El argumento gira en torno a un entrenador de baloncesto (Nick Nolte) que debe reclutar a los jugadores que formarán la columan vertebral de su equipo universitario. Para conseguirlo decidirá saltarse alguna norma por el camino.
En la nómina de "actores" aparecen: Shaquille O´Neal, Penny Hardaway, Bob Cousy, Marques Johnson, Bobby Knight, Rick Pitino, Larry Bird...
Para la preparación de su papel, Nick Nolte siguió de cerca al inefable Bobby Knight y en el partido que, en la pantalla, enfrenta a los equipos de ambos se impone el de Nolte.
23 febrero 2007
Fallece Dennis Johnson
Se ha confirmado la muerte de Dennis Johnson el base de los míticos Celtics que lograron tres anillos en la década de los ochenta. En el recuerdo, la canasta que puso fuera de combate a los Pistons en la final de la conferencia este del año 1987 tras asistencia de Larry Bird.
Johnson era un jugador muy distinto a su "tocayo" Magic, al que tuvo que enfrentarse en los duelos que hicieron resurgir a la NBA de sus cenizas. Un jugador distinto, un jugador de equipo, casi "un base a la europea". El equipo por encima del rendimiento individual.
La noticia en Marca.
11 diciembre 2006
El Real Madrid y la NBA
Vuelven los comentarios sobre una posible integración del Real Madrid en la NBA. Esta semana hemos podido leer que el club blanco ha firmado un acuerdo de intenciones, con representantes de la liga americana, según el cual en el plazo de tres años podría pasar a formar parte de la mejor liga del mundo. Parece que Ramón Calderón tiene entre ceja y ceja conseguir ese hito; para ello se supone que fichó a Vlade Divac, al que parece que se sigue sin ver por Madrid. Mientras tanto, cada vez que sale a relucir la cuestión de la expansión a Europa de su liga, el comisionado Stern unas veces se hace el loco y otras veces se deja querer.
Cuando se habla de esa expansión se alude a otras franquicias europeas, tres o cuatro, radicadas en capitales que pueden cumplir con los requisitos económicos y de infraestructura pero que, por ejemplo Londres o París, carecen de equipos de primer nivel. La expansión, lógicamente, no puede ser de un único equipo. El futuro blanco en la NBA quedaría ligado a la gestión económica y deportiva de esos otros clubes (en la última ampliación ya fracasó el proyecto de Vancouver). La distancia geográfica entre EEUU y Europa, y los inconvenientes que conlleva para la organización de la competición harían que la desaparición de una sola de las franquicias europeas comprometiese el futuro del resto.
El coste económico inicial del proyecto se estimaría en 600 millones de euros, demasiado para un equipo que sigue dependiendo financieramente del fútbol, demasiado para un club que no pertenece a accionistas sino a sus socios. Una inversión de semejante calibre duplicaría el presupuesto anual de la entidad para esta temporada, cabe preguntarse si la aventura americana conllevaría la conversión del club en sociedad anónima (conseguir la llegada de capital privado sería un requisito sine qua non).
El principal desembolso se destinaría a pagar la cuota de ingreso en la liga y a la construcción de un pabellón con capacidad para 18.000 espectadores; una nueva cancha para el equipo de baloncesto es un cuento que se ha escuchado demasiadas veces, cada vez que ha habido elecciones a la Casa Blanca. Luego vendría la contratación de la plantilla en la que, según el presidente, "en 2009 todos los españoles de la NBA jugarán en el Real Madrid" (preparémonos pues a ver a Gasol y a Navarro jugando de blanco; sería para hacerle la ola a don Ramón). Por supuesto tocaría invertir el rango de los salarios: Calderón o Garbajosa cobrarían más que Raúl o Casillas. Y al final de todo ese camino burocrático a jugar y a esperar: las franquicias europeas estarían entre los torpes del pelotón durante unos cuantos años (Miami Heat ha tenido que esperar una veintena de años para lograr el anillo).
De confirmarse todos esos comentarios, esta vez, la entidad que fue protagonista en la creación de las competiciones internacionales de clubes (de baloncesto y fútbol) habría elegido ser un actor secundario. Quizás la opción lógica sería liderar, una vez más, al deporte profesional europeo y perseguir la construcción de una liga profesional obviando los riesgos del reto americano.
Artículo publicado en Libertad Digital (10/12/2006)
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